Qué darle de comer a un bebé de 2 años

El ritmo de crecimiento de tu niño de 2 años ha disminuido, por lo que no necesita realmente tanto alimento como vos podrías pensar. Además es muy obstinado con respecto a lo que comerá (y dónde lo comerá y cuándo lo comerá, así como en qué tazón lo comerá). ¿Cuál es el primer consejo que ofrecemos? Poné atención a cómo te enfrentás a la situación.

Admitilo: no podés ganar.Si cedés a estos hábitos quisquillosos discretamente, tu hijo no peleará tanto por ellos. Insistir con tu forma solo hará que la batalla sea más importante para él. Dicho esto, no le preguntes qué quiere comer: eso es demasiado poder para que maneje una persona tan pequeña. Vos elegís entre alimentos razonables y aptos para chicos.

Asegurate de que tu hijo coma en la mesa. Las personas que comen en horario y lugar fijos, generalmente, consiguen la mejor nutrición y están en mejor forma física. Establecé temprano este buen hábito. Alejá las comidas del auto o de la cama, y de la televisión. Si tu hijo no toma mucha leche, dale calcio en forma de queso o yogur. Ya debería estar desacostumbrado a la mamadera por completo.

Evitá una pelea por la comida. Si tu hijo de 2 años se niega a comer lo que le ponés en frente, la confrontación rotunda no te llevará a ningún lado. Probá estos métodos en su lugar:

  • Sacalo de la mesa e intentá nuevamente en un par de horas, en la siguiente comida.

  • Comenzá con un bocadillo nutritivo, como queso y galletas o frutas. Colocalos en una bandeja y acompañalo.

  • Si aún se niega, volvé a bajarlo y dejá de preocuparte. Ningún niño saludable, incluso uno de 2 años, ha pasado hambre por propia voluntad.

Coordiná con la guardería. Preguntá a la guardería acerca de los hábitos alimenticios de tu hijo durante el día. Los niños aprenden de los distintos entornos de cuidado, y hay mucha flexibilidad en la dieta de los niños. De ser posible, pasá a almorzar con tu hijo de vez en cuando.

En resumen

Tal vez te parezca que tu bebé de un año no quiere comer nada más, ahora que su apetito y ritmo de crecimiento han disminuido. Razón de más para tentarlo con bocadillos nutritivos, saludables y sabrosos. Los huevos, las frutas frescas, verduras cocidas, cereal sin azúcar, nueces o semillas, son algunos ejemplos de bocadillos nutritivos para tu pequeño.

Sobre el contenido aquí publicado

La información de este artículo se basa en las recomendaciones de expertos que se encuentran en fuentes rigurosas: médicas, institucionales y/o gubernamentales. En ninguna circunstancia, el contenido de esta página debe reemplazar las sugerencias médicas y/o de especialistas. Es responsabilidad del lector siempre acudir a los profesionales para obtener orientación precisa. Para más información de nuestros lineamientos editoriales, consulta el apartado Ética Editorial de Pampers®.